Claramente visible desde la superficie, el agujero azul en la República de Malta es el sitio de buceo más concurrido de la isla, una cueva que se sumerge desde unos 15 metros por debajo de un barranco, y que se puede explorar para descubrir las formaciones de roca, túneles y arrecifes de coral con una impresionante vida marina, inusual para lo que podríamos esperar en el Mar Mediterráneo.

Para arribar a la isla de Gozo, hay que hacerlo desde el Aeropuerto Internacional de Malta, abordando un ferry para comunicar a la isla. En la zona, el mar es increíblemente cristalino gracias al lecho marino rocoso, pero además es sumamente iluminado y con juegos de sombras que resultan sorprendentes. En la zona de Blue Hole, la naturaleza puso aún más esmero, para crear un espacio de belleza incomparable, refugio de numerosas especies entre las que destacan caballitos de mar, peces y coloridas algas.

El Blue Hole de Gozo, se encuentra frente a una enorme ventana de roca que termina de coronar un entorno imponente. En la zona, resulta difícil caminar por la piedra caliza hasta llegar al agujero azul. Sumergirse y recorrerlo supone toda una aventura, descendiendo por varios metros hasta acceder directamente al mar por un enorme arco submarino. Es el paseo perfecto para la exploración y la fotografía submarina.